Escapadas para San Valentín: los pueblos más románticos para pasar una velada mágica

Sí… El día de los enamorados es todo el año y el amor se demuestra cada día. Y sí, no necesitas que te hagan un regalo -ni hacérselo tú- para demostrar lo loco o loca que está por ti. La teoría la sabemos, pero, a quién no le gusta marcarse un buen de fin de semana a solas con esa persona tan especial, al margen de los ruidos de la ciudad, del estrés del metro o de la rutina de día libre. Márcate una de esas escapadas para San Valentín, los dos os lo merecéis.

Aún quedan unos días, los justos para hacer organizar un viaje improvisado por los rincones más bonitos de España, no hace falta coger un avión y plantarte en Roma, Venecia o París para disfrutar un 14 de febrero de ensueño, aquí tenemos pueblos en los que plantarte en unas horas y que merecen una visita:

Tossa del mar, Girona. «Un pueblo medieval marinero en la Costa Brava». lugar con aires medievales, calles empedradas y naturaleza viva. La muralla que rodea esta villa de sol y playa permanece casi intacta, a pesar de haber sido construida en el siglo XIV.

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Mijas, Málaga. Su belleza va más allá de sus míticas casitas agolpadas en lo alto de la sierra; su encanto reside en la confluencia de la tradición con el desarollo. De tradición agrícola y pesquera, este pueblo es un atractivo turístico para muchos extranjeros, lo que le proporciona ese toque multicultural en un entorno tan visiblemente arraigado a viejas costumbres.

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Aranjuez, Madrid. Es la mejor opción para aquellos que no puedan -o no quieran- desconectar del ritmo de la ciudad, porque la capi está a tan solo a 40 minutos de coche. Aranjuez es famoso por su Palacio Real, sus jardines tienen esa combinación de naturaleza a la luz del sol y magia a la luz de la luna.

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Potes, Cantabria. Un lugar en el que, simplemente, dejarse llevar por el ritmo de tus pies. Recorrer sus calles, llenas de encanto, y parar a almorzar en cualquier bar o restaurante a tomar una sidra, comer un cocido montañés o probar su delicioso chorizo a la sidra. Su ubicación, a los pies de los Picos de Europa, le hace perfecto para oxigenar cualquier relación 😉

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Binibeca, Menorca. Aunque sí necesitas coger avión o barco, la escapada merece la pena. Es un destino cercano pero fuera de la península, lo que te hace desconectar literalmente de casa y pensar solamente en el «aquí y ahora». Olor a mediterráneo, paseos bajo las estrellas, casas blancas, silencio en sus calles… El romanticismo está asegurado.

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Cudillero, Asturias. Si buscas imágenes de este precioso municipio y luego googleas «Cinque Terre» verás que hay joyas que buscamos fuera y en realidad están más cerca de lo que creemos. Esencia pesquera, vistas al mar y sensación de estar metida en medio del mediterráneo. Y, como buen pueblo del norte de España, verde, mucho verde a su alrededor.

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Estás a tiempo de encontrar hoteles o casas rurales, hacer las maletas y regalarte tiempo para disfrutar con la persona a la que quieres. Ahora solo te falta decidir si la quieres sorprender o lo planeáis juntos 😉

 

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