Con las comidas y cenas de Navidad, los mazapanes y el turrón, puede que hayamos cogido unos kilos de más. Son efectos colaterales de haber disfrutado de los días libres, las reuniones familiares y los caprichos navideños, nada que no se pueda compensar con una dieta equilibrada y un poco de deporte extra en el mes de enero. Adelgazar en estas épocas no es tan difícil como lo pintan, tan solo hay que proponérselo 😉
Para los días entre festivos, puedes optar por dietas depurativas puntuales, es decir, las dietas de un día en las que las frutas tienen el papel protagonista. Hay una serie de frutas que son ideales para este tipo de respiros, apunta:
– Piña. Tiene muy pocas calorías y mucha agua (alrededor del 85%) y fibra. Es un alimento diurético que ayuda a eliminar grasas y evitar la retención de líquidos. Es, además, una de las frutas de temporada, por lo que podemos encontrar piñas súper ricas. Ideal para un día de resaca navideña.
– Uva. Fibra, potasio, vitaminas… Es completa y además saciante. En zumo o al natural, ayudará a que al día siguiente te sientas más ligero.
– Manzana. Además de su poder saciante, la manzana ayuda a desintoxicar el hígado por su contenido en cisteína. Por ello, si la noche acabó con alguna copa de más, te irá bien incluirla durante el día después.
– Naranjas y mandarinas. El invierno es la época de las naranjas y mandarinas. En zumos o al natural, te ayudarán a sentirte mejor y a prevenir o aliviar resfriados, propios de este frío.
– Limón. Un zumo en ayunas te ayudará, a depurar el hígado y a perder peso -o a deshacerte del exceso de grasa- además de beneficiar tu sistema inmunológico y tu piel.