Después de unas largas y merecidas vacaciones, volver al trabajo se hace muy cuesta arriba. El verano es la época perfecta para viajar, desconectar de la rutina, descansar de los esfuerzos y reparar nuestro cuerpo y mente para sentirnos cargados de energía durante el resto del año. Por eso, volver al trabajo después de esta época tan maravillosa es difícil y puede desequilibrar todo lo que hemos conseguido sembrar durante los días de descanso. Estos son algunos de los consejos que muchos expertos recomiendan seguir para afrontar la vuelta a la oficina de la mejor manera posible:
1. No empieces un lunes. Comienza la semana de trabajo con menos días por delante, como por ejemplo a mitad de semana. Tener dos o tres días de trabajo la primera semana te ayudará a coger el ritmo más fácilmente y evitarás caer en la tristeza de dejar de golpe las costumbres de estar de relax.
2. Incorpora rutinas de vacaciones. Es muy fácil y seguro que te harán llevar mucho mejor el ritmo de trabajo. Por ejemplo, desayunar con calma, leyendo la prensa o viendo las redes sociales o bien sacar un rato libre para quedarte en el sofá leyendo un libro antes de acostarte son acciones que se asocian al tiempo libre, pero pueden convertirse en hábitos sin tener que hacer demasiado esfuerzo.
3. Piensa en planes a corto plazo. En lo que harás el próximo fin de semana, en la próxima escapada de temporada, en el próximo puente… Planear viajes cortos pero intensos. El verano quedó atrás y el próximo aún está por llegar, pero organizar viajes a corto plazo es una de las mejores formas de soñar despierto y de disfrutar con cada uno de ellos. Si eres viajero, seguro que encuentras miles de oportunidades para hacer la maleta, no hace falta irse muy lejos ni gastarse mucho dinero, hay muchos rincones por descubrir más cerca de lo que creemos.
4. Cuida tu alimentación y duerme bien. Nuestro equilibrio físico y mental depende de cómo nos cuidemos por dentro y consigamos mantenernos sanos y con energía para aguantar el bajón emocional que supone volver al trabajo.
5. Haz planes. La actividad no cesa después de las vacaciones. Los amigos se reencuentran tras el verano, los restaurantes vuelven a abrir en la ciudad, que retoma el ritmo de la vida nocturna y calienta sus locales para acogerte en las noches frías que están por llegar. El cine, los cafés, las tiendas… hay mucha vida esperándote a partir de septiembre.