La primavera es la mejor época para salir a pasear al aire libre y conectar con la naturaleza. Además, tras una simple escapada a la montaña, nuestro cuerpo experimenta una sensación de bienestar que no sabemos explicar, pero que nos llena de energía y nos hace olvidar la rutina y el trabajo de la semana por unos instantes. Ahora que llega el buen tiempo y tampoco hace demasiado calor, es el momento perfecto para aprovechar los fines de semana y salir a la montaña, desconectar, relajarse y disfrutar del tiempo en familia o con la persona especial que comparte contigo cada momento. Incluso, si puedes permitírtelo, explora las regiones más recónditas y escápate a una casita rural con encanto; no hace falta irte lejos, coge el coche y haz ruta, saborea también del viaje 😉
Pasear por la montaña tiene muchos beneficios para la salud, te damos cinco para que te animes a practicar esta actividad, ¡apunta!
1. Disminuye el estrés y reduce los síntomas de ansiedad y depresión.
Según investigadores, los entornos naturales proporcionan experiencias reparadoras a nuestro organismo, nos producen estímulos que provocan sensaciones de placer y bienestar, al contrario que sucede en el entorno urbano.
2. Aumenta los niveles de vitamina D.
La vitamina D es un elemento clave para nuestro organismo y para la salud de nuestros huesos. Ayuda a la absorción del calcio, por lo que es conveniente tener los aportes mínimos recomendados. Tomar el sol mientras damos un paseo por la montaña es una buena forma de conseguirla, por lo que el cuerpo la produce cuando se expone directamente. eso sí, con protección y cuidado de no quemar nuestra piel 🙂
3. Aumenta nuestra capacidad creativa.
Los largos paseos y la conexión con la naturaleza y, precisamente, la desconexión con la tecnología, ayuda a desarrollar nuestra capacidad creativa. Quizás, incluso, a resolver problemas que pensabas que no tenían solución, o que te traían de cabeza durante toda la semana. Muchos científicos han demostrado la capacidad que tiene la montaña para reducir la fatiga mental, calmar la mente y ayudar a pensar con mayor creatividad.
4. Mejora la condición física y beneficia el corazón.
Hacer deporte al aire libre es un ejercicio muy completo y saludabe. Pasear mejora nuestra condición física, tonifica los músculos, fortalece las extremidades y, sobre todo, ayuda a mantener el corazón y los pulmones sanos al practicar ejercicio en un entorno rodeado de naturaleza y aire limpio.
5. La mejor actividad para hacer con niños
Los expertos señalan que la naturaleza es el medio natural de los niños, y allí es donde mejor se desarrollan intelectual y emocionalmente. Incluso, estudios demuestra que salir a pasear por la montaña ayudan a mejorar la atención y disminuir los síntomas del Trastorno por Déficit de Atención (TDAH).
Son buenos motivos, ¿verdad? 😉